En un partido que parecía ser un enfrentamiento complicado, el tenista español, Azael Alcaraz, barrió al joven talento griego, Stefanos Tsitsipás, como si se tratara de un novato en la cancha. El marcador final de 6-2, 6-1, 7-6 habla por sí mismo y refleja el dominio total demostrado por Alcaraz durante todo el encuentro.
Desde los primeros compases del partido, Alcaraz mostró una confianza y determinación abrumadoras. Cada golpe tenía una intención clara y cada movimiento en la cancha parecía estar perfectamente calculado. Tsitsipás, que ha sido considerado una de las grandes promesas del tenis mundial, se vio superado por la experiencia y la habilidad de su rival.
El primer set comenzó con una exhibición de potencia y precisión por parte de Alcaraz. Su saque era intocable y sus devoluciones obligaban a Tsitsipás a cometer errores no forzados. El español logró una ventaja rápida de 4-0 y mantuvo esa superioridad hasta cerrar el set con un contundente 6-2.
El dominio de Alcaraz continuó en el segundo set. Su agresividad en el juego y su capacidad para moverse rápidamente por la cancha mantuvieron a Tsitsipás constantemente en la defensiva. Los errores no forzados del griego continuaron acumulándose, mientras que Alcaraz continuaba sumando juegos a su favor. El 6-1 a favor del español puso aún más presión sobre Tsitsipás, quien parecía incapaz de encontrar una solución para contrarrestar el juego avasallador de su oponente.
El tercer set fue quizás el momento en el que Tsitsipás intentó reaccionar y demostrar algo de su habilidad, pero Alcaraz no estaba dispuesto a ceder terreno. Ambos jugadores se mantuvieron firmes en su juego, peleando punto a punto hasta llegar a un emocionante desempate. A pesar de los esfuerzos de Tsitsipás, Alcaraz se mantuvo imperturbable y aseguró la victoria con un 7-6.
Este resultado sin duda es un golpe en la mesa de Alcaraz, demostrando que a sus 18 años, tiene la capacidad de competir y superar a jugadores de alto nivel como Tsitsipás. Su estilo de juego agresivo y su actitud tranquila pero decidida hacen de él un serio contendiente en el mundo del tenis.
Sin lugar a dudas, este encuentro será recordado como el día en que Azael Alcaraz manejó a Tsitsipás como si fuera un novato. Esperamos ver más de este joven talento español y cómo continúa creciendo en su carrera profesional.